viernes, 1 de noviembre de 2013

Sensualidad

Sus miradas se cruzaron por fin. Hacía mucho tiempo que deseaban que llegara ese momento. No podían dejar de mirarse fijamente a los ojos, con las manos entrelazadas y temblorosas de la emoción.
Habían deseado tanto que llegara ese momento!
Pidieron al camarero dos Coca-colas y encendieron un cigarro. Era Otoño en Asturias, hacía frío para estar en la terraza, pero los nervios las hacían estar acaloradas.
Una de las manos acarició la cara de la otra muchacha. Estaban muy nerviosas. Se les atropellaban las palabras al hablar.
Una de las chicas acercó lentamente su cara a la de la otra chica y sus labios se unieron en un beso dulce y temeroso, lleno de ternura y nerviosismo. Poco a poco se fue volviendo cada vez más apasionado, y se dieron cuenta en ese mismo instante que ya no se separarían jamás.

lunes, 25 de febrero de 2013

Por qué mamá?

Una cálida noche de junio vine al mundo. Mi padre ayudó a sacarme de tu barriga. Tuvieron que hacerte cesárea porque el embarazo empezaba a complicarse y así naci yo, apenas un kilo seiscientos de peso y cubierta de lanugo. Los compañeros de mi padre dijeron que no se hicieran muchas ilusiones, que muy probablenente no sobreviviría, asi que me colocaron en una incubadora y allí permanecí hasta alcanzar el peso necesario. Decían que tenia unos ojos muy vivarachos y unas tremendas ganas de vivir. Y conseguí mi propósito. 
Ya en casa mi vida junto a vosotros fue maravillosa. Estábais pendientes de mí a cada momento, y las muestras de cariño eran constantes. Me hicísteis muchas fotos, videos, grabaciones caseras cantando canciones que me enseñaba mamá... Vivía en un mundo perfecto con padres perfetos. En especial tú, mamá, que eras y sigues siendo mi angel de la guarda.
Recuerdo perfectamente que nos bañábamos juntas cada día, comíamos y cenábamos juntas, dormíamos juntas, jugábamos juntas...
Eras mi mejor amiga, la mujer mas buena de este mundo y con una paciencia y un amor infinitos. Sé que éramos la envidia de la familia. Así pasé mis primeros siete años, en un mundo construido en torno a mí.
Un fin de semana decidimos ir a casa de mi madrina, lejos de donde vivíamos, para cambiar un poco de ambiente. Papá se quedó trabajando.Junto a mi madrina iba también su nieta pequena, de mi misma edad. Las cuatro cogimos el tren y luego el funicular hasta llegar a la casa. Durantw el camino cantamoa y reimos sin parar.
Llegamos a la casa al mediodía y subimoa a las habitaciones a deshacer las maletas y ventilar las estancias. Muy pronto Elena y yo cogimos la pelota y bajamos al jardin a jugar. Ya llevábamos vatios minutos cuando la voz de mi madrina me alertó, llamánfome. Gati!! Sube, corre!!- gritaba ella.
Yo subí como un rayo y cuando llegué a la habitacion me encontré con mi madre inconsciente en el suelo. Me asuaté mucho pero supe reaccionar muy bien para mi edad. Mi madrina me pidió que la ayudase a subirla a la cama y luego ella fue a llamar al médico. Me pidió que no me separara de mi madre por si se caía de la cama y me senté a su lado, cogiéndole las manos y mirándola atentamente. Estuve así hasta que llegó el médico, que me hizo salir de la habitación para examinarla y que yo no le escuchara. Pero, a pesar de cerrar la puerta, me quedé allí con la oreja pegada a la puerta y escuché algo que no he olvidado jamás: "Es un derrame cerebral. No tiene solución".

En aquellos momentos creí que el mundo perfecto que habían constrido para mí se derrumbaba en un instante.Eataba asustada, preocupada, angustiada... y sola. Por primera vez me sentí terriblemente sola en un mundo que ya no comprendía.
Una ambulancia no tardó en llegar y se llevó a mi madre con la vida pendiente de un hilo y con toda mi felicidad. Me dió tiempo a abrazarla en la camilla, y mi madrina tuvo que separarme. Nunca más la volví a ver. Se llamaba María y con ella se fue para siempre una parte de mí. 

Desde entonces la llevo en mi corazón,y, aunque la echo mucho de menos, tengo la convicción de que vela por mí y por los míos allá donde esté. Y sé que algún dia nos volveremos a encontrar.